El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, inauguró la Conferencia de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) sobre recursos naturales y desarrollo en la región, que se celebrará en Caracas durante tres días consecutivos. Desde el día de hoy, lunes 27 de mayo, hasta el jueves 30 de mayo de los corrientes.
Al evento asistió una representación de CIENCiA, encabezada por el contralmirante Roberto Betancourt, director del centro. Igualmente, el contralmirante Miguel Maneiro, comandante del Cuerpo de Ingenieros de la Armada, asistió al importante evento.
Durante su intervención, el jefe de Estado hizo un recorrido histórico sobre la conformación de este bloque, cuando desde la isla de Margarita se inició la maduración de este espacio de unión suramericana “dentro de la diversidad política e ideológica”.
También hizo un reconocimiento a la secretaria general de este bloque, que ha “conformado la estructura para articular a esta Suramérica que pasó dos siglos de espaldas, a pesar de que estábamos juntos”.
Recordó, además, que el bloque ha superado suficientes desafíos, como los intentos de golpes de Estado en Bolivia, Ecuador y Venezuela, este último luego de la partida física de nuestro Comandante Supremo y de las elecciones presidenciales que ratificaron la continuidad de la Revolución Bolivariana este año.
El primer mandatario anunció que “la máxima reserva y patrimonio que tiene Unasur es la moral de democracia, de zona de paz que tiene la región. Ha planteado Alí Rodríguez Araque que el tema de los recursos naturales y el desarrollo soberano debe formar parte de la agenda central articuladora de Unasur, nosotros estamos de acuerdo con eso”.
También manifestó que es vital “una agenda estratégica de la región para darle objetivos claros y dinamismo hacia los próximos años”, ello acompañado por la presidencia pro tempore y los doce consejos ministeriales, una pauta hacia la forma de desarrollo que se quiere construir en Suramérica.
Maduro afirmó que es necesario que el resultado de esta conferencia, “una vez aprobado por el consejo presidencial, pueda arrojar para la próxima cumbre en Lima (y que entregará la presidencia a Surinam) una agenda de decisiones presidenciales hacia la organización para el futuro. Más que un ejercicio de conocimiento científico de debate de ideas y de propuestas, que también debe serlo, yo le pediría al secretario general y a las autoridades presentes que el debate logre el objetivo de ser la agenda estratégica presidencial para darle rumbo y forma a las cumbres”.
Propuso no hacer pesadas las agendas que a veces pueden ser desarticuladas y aisladas, sino llevar a Unasur por un camino certero y conjunto “en la necesidad de ir construyendo un pensamiento político suramericano, nuestroamericano”.
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